Este fanfiction se actualiza primero en Wattpad —> 2-3 capítulos por semana —> En Wattpad, está hasta el capítulo 36 —> Al principio puede resultar extraño, pero a medida que avanzan los capítulos, la calidad mejora significativamente. Por ejemplo, el capítulo más reciente: 36 —> Fanfiction en español en ambas plataformas —> Enlace de Wattpad si quieres ir en la sipnosis.
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El rubio continuó su viaje saltando con agilidad felina de árbol en árbol, hasta que el sonido de agua corriente lo atrajo hacia un riachuelo. Se detuvo, se inclinó y, con las manos ahuecadas, bebió un poco del agua cristalina, manteniendo siempre los sentidos alerta. Aunque su resistencia le permitía pasar días sin hidratarse, nunca desaprovechaba la oportunidad de reponer fuerzas cuando se presentaba.
Alzó la vista hacia el cielo. El sol ya se había ocultado por completo, sumiendo el bosque en una penumbra azulada. "Se hizo de noche antes de lo que pensaba",murmuró para sí.
Se disponía a reanudar su marcha cuando un ruido leve, casi imperceptible, lo hizo detenerse en seco. El sonido provenía de un matorral espeso, a unos siete metros de altura en una pendiente cubierta de maleza.
Inmediatamente, su cuerpo adoptó una postura de alerta. Aunque no supiera con certeza dónde estaba, los instintos de shinobi, forjados en un mundo de peligros constantes, no lo abandonaban. Ajustó su mirada, enfocándose en la fuente del sonido. Sus sentidos, agudizados de manera sobrehumana gracias al chakra y al entrenamiento, le permitieron captarlo: una respiración entrecortada, el rápido y nervioso latido de un corazón... y no era el de un adulto. El ritmo era el de un niño.
"Sal... Sé que estás ahí", dijo el rubio, manteniendo la voz calmada pero alta. "No te preocupes, no te haré nada. Mira... no tengo nada con qué lastimarte"
El silencio reinó durante unos segundos tensos. Finalmente, con extrema cautela, una pequeña cabeza asomó entre las ramas. Era una niña. Tenía el cabello rubio cortado un poco por encima de los hombros, sujetado con una diadema, y la piel pálida estaba cubierta de suciedad que apenas dejaba entrever un rostro cubierto de pecas. Una pequeña gringa.
Para una persona normal, distinguir detalles a esa hora hubiera sido imposible, pero para los ojos entrenados de un ninja, era tan claro como la luz del día.
"No, no lo hagas... no grites... esas cosas vendrán...", susurró la niña, su voz temblorosa cargada de pánico"
El rubio la entendió perfectamente. Le agradeció mentalmente a su estricta profesora de inglés, cuyas lecciones parecían ahora un regalo del cielo. Con un movimiento fluido y silencioso, dio un salto imposible que lo llevó directamente al lado de la niña. Ella retrocedió, sobresaltada, pero él solo soltó una risa suave y tranquilizadora.
"Ah, no te preocupes por esas cosas. Tú y yo somos los únicos en la zona", afirmó mientras le revolvía el cabello con gentileza. Era cierto; había rastreado mentalmente la zona y los zombis más cercanos estaban a una distancia considerable.
La niña se quedó paralizada un instante por el contacto inesperado, pero luego, como si una presa se hubiera roto, sus ojos se inundaron de lágrimas y comenzó a llorar en silencio, frotándose los ojos con los puños.
El rubio se quedó momentáneamente desconcertado. En el Mundo Shinobi, ver llorar, incluso a un niño, era una rareza que a menudo se penalizaba con la etiqueta de "debilidad". La crudeza de aquel mundo no dejaba mucho espacio para las lágrimas. Sacudiendo levemente la cabeza para despejar esos recuerdos, se arrodilló para quedar a la altura de la pequeña.
"Oye... ¿qué pasó? ¿Y tu familia, pequeña? ¿Sabes dónde están? Te puedo llevar con ellos si me dices dónde", le preguntó, intentando en vano secar sus lágrimas con el pulgar.
No necesitaba que respondiera para entender. La ecuación era simple: zombis + bosque + niña asustada y perdida = apocalipsis. Eso, sumado a la ropa moderna de la niña, confirmaba sus sospechas: definitivamente ya no estaba en ninguno de los continentes de su mundo anterior.
"sniff sniff, Umm, me perdí sniff. Pensé que esas cosas me comerían... sniff. Me escapé porque me perseguían sniff y me alejé de mi mamá sniff sniff", explicó entre sollozos que se intensificaron.
Con un suspiro resignado pero lleno de determinación, el rubio la tomó en brazos como si fuera una princesa. Con otro salto imposible, ambos estuvieron de vuelta en una rama alta y segura. La niña, Sophia, dejó de llorar abruptamente, sus ojos se abrieron como platos por la hazaña y luego miró el rostro del joven con una mezcla de asombro y confusión.
Él la sostuvo con firmeza y comenzó a saltar nuevamente entre las copas de los árboles. Sophia se aferró con fuerza a su cuello, apretando los ojos con fuerza. El rubio resopló, divertido por su reacción.
"No hay que tener miedo. Si te caes, yo te agarro... Oh, por cierto, ¿cómo te llamas?"
La niña se aferró aún más fuerte al escuchar la pregunta, como si el hablar pudiera hacerla caer. "Sofía....me llamo Sofía"
N/A: [Es Sophia, pero ñee....]
"Ya veo, Sofía. Yo soy....."
Una pausa. ¿Cómo debía llamarse? Había tenido un nombre en su vida anterior, pero durante diecisiete años había respondido a otro. "Naruto" era una parte fundamental de su identidad ahora. Si alguien lo gritaba, se volvería por instinto.
Tras un breve momento de reflexión, lo decidió. "Soy Naruto,Sofía... Por el momento buscaremos un lugar mejor para dormir y mañana buscaremos a tu madre, ¿ok?"
"Está bien... sniff Había autos de donde me separé del grupo... sniff tal vez hay un..."
"¿Se quedó dormida?... Supongo que está cansada", musitó el rubio al notar que la pequeña cabeza reposaba pesadamente sobre su hombro, agotada por el miedo y la adrenalina. "Así que viajan en grupo... Solo espero que sean buenas personas. Si no, bueno..... no voy a dejar a un niño con la porquería".
Su mente retrocedió al Naruto world, como decían las traducciones. Allí, los bandidos y los nukenin que tomaban rehenes eran una plaga común. Los hombres para trabajos forzados, las mujeres y niñas... para fines mucho más siniestros, sin importar la edad ni la presencia de sus familias. El recuerdo de una misión con el Team 7 surgió en su mente, vívido y amargo. La misión que Kakashi-sensei les había ocultado hasta el último momento: limpiar un campamento de esa escoria. La imagen de los rostros demacrados y aterrorizados de los cautivos, el fuego que ardió en su sangre, la frialdad con la que Sasuke y él habían tenido que actuar, y la angustia palpable de Sakura. Esa había sido la primera vez que sus manos se mancharon de sangre, y no sintió remordimiento por los despojos humanos que eliminó, sino un vacío frío y extraño por haber arrebatado una vida, por asquerosa que fuera.
Sakura no había matado a nadie, solo había neutralizado. Sasuke había acabado con un par. Pero él, previendo que no sería la última vez, decidió que era mejor acostumbrarse lo más rápido posible. Tal vez el Naruto original habría encontrado otra forma, con su Talk no Jutsu. Pero él no era ese Naruto.
Y, como predijo, no fue la última vez.
'HAN PASADO TANTAS COSAS, NIÑO'
Una voz áspera y familiar resonó en su mente, haciendo que almost esbozara una sonrisa.
"Je... Y hasta ahora te dignas a hablar, Kurama. Pensé que habías muerto. ¿Qué hacías que ahora hablas?"
'No exageres... solo dormía un poco.... Uuu.... ¿Dónde estamos?'
"No lo sé. Me tragó un portal y me escupió aquí... ¿sabes lo que es un zombie, Kurama?"
'POR TUS RECUERDOS ERAN... ¿CÓMO ERA?... AH, SÍ, ERAN HUMANOS QUE DEVORABAN A OTROS HUMANOS ¿VERDAD?' El Zorro de Nueve Colas siempre lo sabía todo, era como una enciclopedia de sus propias experiencias.
"Sí, esos son... Parece que me teletransporté a un mundo así, con zombies y apocalipsis".
'OK... SUERTE, SUPONGO... LLÁMAME SI NECESITAS AYUDA *BOSTEZO*'
"Maldito vago...", murmuró el rubio con un tono de familiaridad que rayaba en el cariño. "No importa. Lo primero, según Sofía hay autos donde se separó de su grupo... tal vez haya un lugar para dormir... Si voy por aquí, tal vez los encuentre, incluso a su grupo...".
No sabía por qué se habían separado, pero si seguía la dirección por la que había llegado Sofía, tal vez diera con ellos.
...
N/A: [Espero que te haya gustado]
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