Mientras tanto, En un rincón de una de las casas más grandes del pueblo, una joven embarazada de nombre Emiko, estaba discutiendo con su familia.
Emiko estaba ansiosa por salir a ayudar a los habitantes y detener a Uchiha Ming, creia que sus habilidades médicas podrían ser cruciales para salvar la vida de las personas.
"No....no podemos dejarla salir," dijo el padre de Emiko, un hombre anciano y temeroso. "Ese hombre es un demonio. Matará a cualquiera que se acerque."
"Pero papá, soy médica," argumentó Emiko, con lágrimas en los ojos. "Puedo ayudar. Si lo hago, quizás nos deje en paz. No podemos quedarnos escondidos esperando a que nos mate a todos."
El esposo de Emiko intervino, agarrando el brazo de su esposa. "Emiko, no. Es demasiado peligroso. No sabemos qué hará ese hombre. Quédate aquí con nosotros."
Si las cosas se ponen feas hare lo posible para ayudarte a escapar a ti y al niño, así que esperemos un poco mas, además ya hemos mandado una carta de ayuda a una de las familias cercanas. No tardarán mucho en llegar.
Sin esperar a que su esposo terminara de hablar, Emiko se liberó del agarre y miró a su familia con determinación. "Voy a salir. Tengo que intentarlo. Si no lo hago, matará a todos los aldeanos antes de que llegue la ayuda."
Antes de que su familia pudiera detenerla, Emiko se deslizó fuera de la casa, dirigiéndose hacia Uchiha Ming quién acaba de matar a otra persona. con una bolsa de medicinas en la mano. Emiko se acercó con pasos temblorosos pero decididos. "Yo soy médica. Puedo ayudarlo con sus heridas." Solo si deja ir a los aldeanos.
Uchiha Ming tan solo la miró de arriba a abajo, luego asintió. "Bien. Cura mis heridas. Si lo haces bien... quizás te deje vivir."
Emiko comenzó a trabajar en las heridas de Uchiha Ming, usando sus habilidades médicas para tratar los daños. Mientras trabajaba, Uchiha Ming la observaba con intensidad, observando de que no hiciera nada malo.
Uchiha Ming siguió observando a Emiko mientras ella trabajaba en sus heridas. Emiko, por su parte, se esforzaba por hacer su trabajo lo mejor posible, tratando de curar las heridas de Uchiha Ming con habilidad y rapidez. Mientras trabajaba, Emiko no dejaba de preguntar en la condición que había puesto: "sobre dejar ir a los aldeanos."
Sin que ella lo supiera, cuanto más frecuente preguntaba, más se ensombrecia la expresión de uchiha ming.
Cuando Emiko por fin terminó de curar las heridas de Uchiha Ming, él se miró el brazo y el torso donde tenía heridas que aún no habían sanado, notando que las heridas estaban mejorando. Volviéndose hacia Emiko, su mirada se lleno de intenciónes asesina.
"Has hecho un buen trabajo," dijo Uchiha Ming en voz baja. "Pero ¿crees que puedes decirme qué hacer?
tragando saliva, Emiko sabia que estaba en una situación muy peligrosa...
Tartamudeando Emiko hablo, pe.. pero tu dijiste que nos dejarías ir.
Eh, enserió dije eso, no lo recuerdo. Tal vez hubieran tenido la oportunidad de vivir si no estuvieras haciendo preguntas a cada rato.
Ahora mi estado de humor es malo, por lo que no puedo asegurar nada. Al escuchar sus palabras, Emiko sintió un escalofrío recorrer por su espalda. Sabía que Uchiha Ming era un hombre peligroso y que su vida pendía de un hilo.
Penso que ayudandole podría tener la oportunidad de salvar a los demás, pero no fue así, entonces que sentido tendría haberle ayudado. Acaso hizo mal, o debería haberse quedado en casa como le dijo su familia, esperando la ayuda.
Pensando en esto, Emiko volvio a hablar,
"¿Por qué, por qué no dejar ir a los aldeanos?"entre ellos se encuentran niños que aún no han crecido, acaso te han hecho algo, le preguntó Emiko a Uchiha Ming, intentando mantener una voz firme a pesar del miedo que sentía. ¿Por qué matarlos a todos?"
Uchiha Ming solo se rio, una risa cruel y despiadada. "¿Por qué? Tal vez es porque estoy molesto ahora mismo."
¡Molesto!
Emiko derrepente se enojó, apesar de haber sido una persona tranquila, que nunca faltó el respeto a los demás y que era muy querida en el pueblo, en este momento no pudo evitar sentirse molesta, temblando de rabia y miedo. Le reprochó a Uchiha Ming con palabras entrecortadas. "Es... es cruel. No tienes derecho a hacer esto. Son inocentes. Usted es un... un monstruo."
Disfrutando de la reacción de Emiko. Uchiha Ming solo se rió. En un momento de descuido, Emiko, llena de ira y desesperación, intentó apuñalar en él cuello a Uchiha Ming con un bisturí que había usado antes. Pero para su mala suerte, Uchiha Ming era más rapido, en un movimiento rápido y letal, desvió su ataque y luego golpeó su cuello con fuerza, matándola en el acto.
El esposo y el padre de Emiko, que habían estado observando desde la distancia, vieron con horror cómo Uchiha Ming mataba a su hija y esposa.
Enfurecidos por la pérdida, ambos hombres salieron de su escondite. Atacando juntos a Uchiha Ming, con un cuchillo y un hacha, llenos de furor y desesperación. Sin embargo, Uchiha Ming era demasiado fuerte. Apesar de estar herido, no era algo que personas normales pudieran soportar, Con movimientos rápidos y precisos, mató a ambos hombres, sin piedad.
Después de matar al esposo y al padre de Emiko, Uchiha Ming no se detuvo hay. Fue de casa en casa, matando a las demás personas del pueblo que quedaron sin piedad. Aunque algunos intentaron resitirse, al final todos murieron. pronto toda la aldea se llenó de cadáveres y sangre. Los gritos y llantos cesaron pronto, reemplazados por un inquietante silencio mortal.
La aldea quedó vacía y silenciosa, un lugar de muerte y desolación. Uchiha Ming se detuvo en medio de la aldea, rodeado de cadáveres. Mirando a su alrededor, soltó una fuerte risa, satisfecho con la masacre que había causado.
Aunque algunos habían escapado cuando estaba tratando sus heridas, no le importo, ya que las personas que quedaron atras tampoco eran pocas.
Satisfecho con lo que había hecho, se dio la vuelta sin decir una palabra y se fue, no sin antes llevarse todos los remedios que pudo para tratar sus heridas...
Después de que Uchiha Ming se fue, dejando detras de si, una aldea llena de cadáveres y sangre, varias personas llegaron al lugar. El hombre al frente, tenía el cabello largo castaño, con una camisa de manga larga negra y una armadura gris sobre sus hombros.
Al ver el estado miserable de la aldea, se sintio arrepentido de haber llegado tarde. La escena era dantesca: cuerpos sin vida por todas partes, casas destrozadas, y un silencio mortal que envolvía todo. El aire estaba cargado del olor a muerte y destrucción. El grupo recién llegado se movio entre los cadáveres, buscando señales de vida, pero era evidente que la mayoría había perecido bajo el brutal ataque de Uchiha Ming.
Al inspeccionar los cadáveres más de cerca, se dieron cuenta de que alguien aún mostraba signos de vida. Era el bebé que Emiko llevaba en su vientre. El bebé había sobrevivido al brutal ataque de Uchiha Ming, probablemente debido a la protección del cuerpo de su madre.
ordenando a algunas personas que hicieran una cirugía rapida, sacaron al bebé del cuerpo de su madre con cuidado, minimizando el daño para el pequeño.
Tras asegurarse de que el bebé estaba a salvo, dispusieron que varias personas regresaran al clan principal con el bebé en brazos.
Mientras tanto, el resto de personas que se quedaron, se dispusieron a buscar pistas aquí y halla intentando descubrir algo, Pero a pesar de buscar durante horas no pudieron encontrar nada.
Después de fallar la búsqueda, se decidio formar dos equipos de tres personas con la esperanza de encontrar a Uchiha Ming en las cercanías. La búsqueda se intensificó, y cada equipo se dispersó por diferentes direcciones, cubriendo más terreno en busca de cualquier pista o señal.
(dos semanas despues)
uno de los dos equipos de busqueda, se encontraba caminando por un Montañoso bosque, en busca de un lugar de descanso tras haber recorrido la zona durante horas, cuando el silencio se vio interrumpido por un hombre joven que hablo.
Hemos estado buscando en los alrededores de la zona durante horas, pero no encontramos nada, porque no mejor nos vamos a otro lugar, ya casi hemos acabado toda las raciones que trajimos con nosotros, si esto sigue así, nos moriremos de hambre antes de que encontremos al sospechoso. Lo mejor seria reunirnos con el grupo principal y volver al clan para reunir comida, o porque no mejor abandonamos..
Justo cuando el joven estaba a punto de terminar sus palabras. Su cuerpo se detuvo en seco, mientras todos los vellos de su cuerpo se erizaban por completo. Al voltear para mirar a sus compañeros, noto que estos estaban igual. Mientras dirigían su mirada hacia cierta cueva oscura, rodeada de rocas y árboles caídos, que emanaban una fuerte intencion asesina.
Y dentro de la cueva, se encontraba Uchiha Ming descansando, ajeno a las personas que habían llegado y la búsqueda que se había desatado en su contra hace unas semanas.
Al no notar movimiento dentro de la cueva, El equipo de tres se acercó con cautela, observando primero los alrededores, En busca de trampas o alarmas que pudieran despertar al dueño interior. Con la sospecha de que el hombre dentro de la cueva posiblemente sea el culpable de la masacre del pueblo anterior, el equipo decidió mandar una carta de ayuda a sus demás compañeros con la esperanza de reunirlos lo más rápido posible.
La carta decía que habían encontrado al posible sospechoso de la masacre y que era peligroso. La noticia pronto llego al otro equipo quienes no estaban muy lejos del lugar reuniendose en pocos minutos.
Una vez reunidos los seis miembros, se acercaron y rodearon la cueva con cautela. Dos de ellos decidieron adentrarse intentando no hacer ruido para alertar a Uchiha Ming, quien estaba recostado en una roca. Al ver su apariencia, el grupo confirmó sus sospechas: era Uchiha Ming, el responsable de la masacre del pueblo anterior. Hace apenas una semana, se habían encontrado con un anciano que logro escapar a duras penas, estos le habían preguntado sobre la apariencia del hombre que había llegado a su aldea.
Aunque al principio este se resistió a hablar, con la promesa de protegerlo dentro de su clan, este accedió.
El hombre tenía el pelo negro, largo hasta la cintura, y unos ojos rojos que emanaba una fuerte intencion asesina.
Ahora comparando la descripción del anciano con la del hombre que tenían enfrente, Confirmaron sus sospechas.
Sin molestarse en despertar al culpable para interrogarlo. Uno de los presentes alzó su espada, listo para asestar un fuerte golpe en el cuello del culpable. Sin embargo justo cuando la espada tocó su cuello, el cuerpo de este empezó a brillar de un rojo intenso hasta que finalmente estalló en una fuerte explosión...
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La explosión fue tan fuerte que derrumbó la cueva, matando a las dos personas que se encontraban dentro, sin siquiera darles la oportunidad de reaccionar.
Siendo Tomándos por sorpresa, el equipo que esperaba afuera, sufrió pequeñas heridas mientras eran mandados a volar, estrellandose con unos árboles cercanos.
Tras unos minutos de aturdimiento, el equipo finalmente se recupero, mientras observaban los escombros de la cueva, con una mirada de incredulidad. "¿co...como puede ser esto"?, claramente verificamos los alrededores y no encontramos nada... ah no ser que..."
con un destello de sorpresa, otro de los presentes hablo, "clon de sombras. Pero no un clon de sombras normal, este debería de haber estado equipado con algun tipo de técnica lo suficientemente explosivo como para volar toda la cueva.
Pero si habia un clon de sombra preparado de antemano, eso quiere decir que el enemigo nos había sentido mucho antes, tendiendonos una trampa. Si es así, entonces debe de haber estado viendo todo esto desde algún lugar cercano."
soltando un fuerte grito, el líder del grupo dio una orden rapida, "¡todos, reagrupense y protegan al heredero del clan! el enemigo puede estar cerca.
Una vez reunidos los cuatro ¡todos empezaron a mirar los alrededores del bosque con cautela! Y no muy lejos de hay, una figura emergio de la sombras de los arboles. caminaba tranquilamente como si nada le importara, mientras se dirgia hacia el grupo de personas, vestia una túnica negra suelta, y un cabello que bailaba salvajemente con el aire, esta persona era, por supuesto, uchiha ming.
Al ver la apariencia del recién llegados, todos inconscientemente tensaron sus músculos mientras pequeñas gotas de sudor se formaban en su frente, "No hay duda, este debe ser la persona que masacro la aldea anterior" tanto las características como el comportamiento son iguales, pensó el líder del grupo.
Sin embargo, "¿donde vi esos ojos antes"?estoy seguro de que los conozco, aunque no puedo recordarlo con claridad, no espera...ahora no es momento de pensar en eso, este tipo es peligroso".