Ficool

Chapter 14 - FARO DE ESPANZA

El cielo retumbaba con el estruendo de los choques. Chromastone intentaba mantenerse firme, su cuerpo temblaba con cada impacto que recibía.

Terrax lo golpeaba sin descanso, su hacha cortando el aire con una fuerza capaz de partir montañas.

El alienígena bloqueaba algunos ataques, esquivaba otros, pero cada movimiento era más torpe que el anterior. Sus reflejos no fallaban por falta de habilidad, sino por el dolor invisible que lo atravesaba desde dentro.

Cada vez que alzaba un brazo para cubrirse, un grito ajeno resonaba en su cabeza, cada paso que daba hacia atrás estaba acompañado de imágenes de mundos arrasados, de pueblos enteros convertidos en polvo.

Las almas que había absorbido luchaban dentro de él, gritando su dolor, suplicando venganza.

Sus sentidos estaban saturados, veía destellos de niños huyendo, escuchaba madres llorando, sentía el odio de guerreros derrotados. Todo al mismo tiempo.

Terrax avanzaba con calma, seguro de su dominio. Su mirada brillaba con un destello de malicia mientras cada golpe enviaba al petreo defensor contra el suelo o lo obligaba a retroceder varios metros.

-Eres más frágil de lo que aparentas *gruñó Terrax mientras giraba su hacha con una destreza letal* Tu cuerpo es resistente, pero tu mente… está al borde del colapso.

Chromastone intentó lanzar una descarga de energía cósmica, pero el haz tembló en el aire, inestable, debilitado por el caos dentro de su mente.

Terrax lo interceptó con una pared de roca que surgió a su alrededor, disipando el ataque como si nada. Se lanzó sobre él con un salto brutal, estrellando su puño reforzado con piedra en el torso del alienígena y enviándolo de espaldas contra el suelo. El estruendo sacudió el campo de batalla.

-¿Escuchas sus gritos? *dijo Terrax mientras caminaba lentamente hacia su enemigo caído* Cada alma que grita dentro de ti es un testimonio de mi obra. Cada voz que te atormenta es un monumento a mi ambición.

Chromastone intentó levantarse, pero Terrax lo pateó con fuerza en el abdomen, haciendo que se agrietara ligeramente su armadura natural.

-Hace mucho tiempo serví a un ser al que muchos llaman dios *continuó Terrax, su voz grave y fría* Galactus. El Devorador de Mundos. Pero servir no era suficiente. ¿Por qué arrodillarme cuando podría ser yo quien domine?

El guerrero trató de levantarse otra vez, sus manos brillando mientras intentaba canalizar energía, pero otro golpe lo detuvo en seco.

Terrax lo sujetó del cuello, levantándolo del suelo con una sola mano.

-Por milenios he cosechado poder *dijo Terrax, su voz ahora baja y peligrosa* Cada mundo que destruí, cada vida que arrebaté, no fue por capricho… fue por fuerza. Alimenté lo que Galactus me dio. Lo tomé, lo cultivé, lo perfeccioné. Sus dones fueron míos, y luego los convertí en algo mayor.

Chromastone forcejeó, sus manos buscando romper el agarre, pero Terrax apretaba sin esfuerzo, sus ojos brillando con satisfacción.

-Ahora tengo el poder de mil civilizaciones en mi interior, y me acerco más cada día mas a mi meta, tomar la cabeza de aquel que alguna vez llamé maestro. Y ahora… *Terrax acercó el rostro al de su prisionero, observándolo con curiosidad científica* tengo algo mejor. Un sujeto de prueba. Un conducto. Alguien capaz de canalizar energía cósmica sin desintegrarse. Con tu cuerpo, con tu don, podría acortar mi camino. Tal vez, con tu ayuda, Galactus caiga más rápido de lo que jamás soñé.

El hacha brilló tenuemente en su espalda mientras Terrax mantenía al joven alienígena alzado por el cuello, estudiándolo como a un experimento valioso.

-Eres la llave, criatura *dijo Terrax, sonriendo con crueldad* Y voy a usarte, aunque tengas que escuchar los gritos de cada alma que devoré hasta que tu mente se rompa.

Chromastone apretó los dientes, la luz multicolor de su cuerpo temblando con intensidad.

Cada respiración era un esfuerzo monumental. Las voces en su cabeza aumentaban, gritando todas a la vez, ahogando cualquier intento de concentración.

El suelo bajo ellos temblaba, resonando con la energía que los rodeaba, pero Terrax se mantenía firme, disfrutando del control absoluto.

Un estallido de relámpagos iluminó el cielo, y un trueno retumbó como si el mismo firmamento se partiera en dos.

Terrax, aún sujetando a Chromastone por el cuello, giró apenas su cabeza… justo a tiempo para recibir el impacto de Mjolnir.

El golpe lo lanzó varios metros atrás, arrancándolo del suelo y estrellándolo contra una pared de escombros que se desmoronó por la fuerza del impacto.

Thor aterrizó entre chispas de energía, su capa ondeando con la tormenta que lo seguía como una extensión de su furia. Se inclinó brevemente hacia Chromastone, ayudándolo a ponerse en pie mientras mantenía el martillo en alto.

-Has luchado bien, guerrero *dijo Thor con voz grave, sus ojos fijos en el enemigo que ya se reincorporaba como si nada* Pero este no es un rival al que debas enfrentar solo, recupera fuerzas, yo me encargare de el

Chromastone asintió apenas, tambaleante. Las voces en su mente seguían desgarrándolo, pero la presencia del dios del trueno le dio un segundo de alivio.

Thor, sin perder tiempo, avanzó con el martillo en mano, dispuesto a retomar el combate.

Terrax salió de los escombros sonriendo con desdén, su hacha brillando tenuemente con energía cósmica.

-Ah, Odinson *gruñó, acomodándose el arma sobre el hombro* El heredero de Asgard. Qué apropiado… otro aspirante a dios que cree que puede detenerme.

Thor giró el martillo en su mano, y los cielos respondieron con un rugido ensordecedor.-No aspiro a ser dios *replicó, su voz firme como el trueno* Ya lo soy.

El dios del trueno se lanzó al ataque, y el choque fue brutal. Cada golpe de Mjolnir retumbaba con la fuerza de mil tormentas, cada impacto generaba ondas de choque que partían el suelo.

Terrax respondía con su hacha, cada tajo impulsado por el poder cósmico que corría en su interior. Por un instante, ambos parecían iguales: la furia de Asgard contra el legado del Devorador de Mundos.

Pero entonces Terrax liberó un destello de energía cósmica, un rayo púrpura que se estrelló contra Thor y lo arrojó a través de varios edificios destruidos.

El dios del trueno rodó por el suelo, levantándose con dificultad, el humo aún elevándose de su armadura. Terrax sonrió.

-Ni siquiera comprendes tu propia divinidad. Odín se a vuelto blando, su otro sucesor no era así, aun permanece en mis recuerdos, portando la muerte como arma...un digno rival...a diferencia de ti.

Antes de que pudiera avanzar hacia Thor, un rugido gutural resonó con tal fuerza que incluso Terrax giró la cabeza

Una mole verde aterrizó frente a él con un estruendo que agrietó el suelo. Hulk, con los músculos tensos y los ojos brillando de ira, golpeó sus puños entre sí, haciendo vibrar el aire.

-La abominación mutante *gruñó Terrax, divertido* la energía que tu alma me dará supera con creces a la de una decena de planetas, ancio arrancarla de tu inanimado cuerpo

Hulk no esperó una invitación. Se lanzó hacia él con un salto colosal, su puño chocando contra el pecho de Terrax y enviándolo varios metros hacia atrás.

El impacto hizo que el suelo temblara como si hubiera sufrido un terremoto.

Thor reapareció, envuelto en rayos, lanzando Mjolnir directo a la cabeza de Terrax, que apenas alcanzó a bloquear con el mango de su hacha.

La pelea se convirtió en un caos. Hulk y Thor atacaban desde dos frentes, el primero con fuerza bruta descomunal, el segundo con precisión divina.

Terrax retrocedía unos pasos, sus pies hundiéndose en el suelo, pero lejos de estar superado, parecía emocionado. Cada movimiento suyo levantaba muros de roca que usaba como armas, lanzando pedazos de tierra reforzada con energía cósmica para abrir espacio.

Thor esquivaba y respondía con rayos que iluminaban la batalla, mientras Hulk arrancaba columnas enteras del suelo para lanzarlas como si fueran simples troncos.

Terrax recibía los golpes, bloqueaba otros, y en cada momento parecía estudiar a sus oponentes, como si la pelea fuera un juego de estrategia.

Finalmente, el Destructor se hartó.

-¡Suficiente! *rugió, golpeando el suelo con su hacha. La energía cósmica se propagó en un estallido, levantando una onda expansiva que derribó edificios cercanos y arrojó a Thor y Hulk hacia atrás. Aun así, ambos se levantaron de inmediato, sus miradas fijas en él.

Por primera vez, Terrax no se movió para atacar. Se quedó quieto, observándolos, midiendo su respiración. Su sonrisa había desaparecido, reemplazada por una expresión más seria.

-Los e subestimado *murmuró* Dos campeones que pueden obligarme a retroceder. Hace mucho que no me encontraba con tal desafío, aun que la mitad de mis energías me fueron robadas, su azaña es digna de elogio

Thor escupió sangre al suelo, levantando su martillo.

-Elogios de un monstruo no son mas que palabras vacías, tu cruzada del terror acaba aquí

Hulk gruñó, golpeándose el pecho y avanzando sin miedo.

-¡HULK APLASTARA TU HORRIBLE ROSTRO!

La batalla estalló otra vez con más violencia. Terrax blandía su hacha, su poder cósmico envolviéndolo como una armadura viviente.

Thor golpeaba con rayos que sacudían los cielos, mientras Hulk lo embestía con una furia sin igual.

Por primera vez desde que comenzó la invasión, el titán parecía obligado a esforzarse de verdad.

================================================================

En el interior de su mente, el mundo era un abismo infinito, teñido de sombras y ecos que parecían no tener fin.

Un joven se sostenía apenas de pie, su respiración temblorosa, mientras el dolor de innumerables voces lo atravesaba como cuchillas invisibles.

Los gritos no cesaban. Eran un coro interminable, súplicas de ayuda, maldiciones y sollozos que parecían rasgarle el alma

Podía sentir cada muerte como si hubiera sido suya, cada tortura, cada injusticia cometida por manos del Destructor pesaban sobre su pecho, como si su corazón fuera incapaz de soportar tanto sufrimiento a la vez.

Avanzó un paso. El suelo bajo sus pies parecía líquido, denso, como si pisara sobre lagrimas ensangrentadas.

Cerró los ojos un instante, intentando encontrar el origen de todo ese dolor, intentando separar los ecos de la realidad.

Y entonces lo vio, una figura pequeña a lo lejos, sentada, encorvada sobre sí misma.

Era un niño.

Su silueta apenas visible entre la penumbra, un destello tenue de luz alrededor suyo.

El joven respiró hondo, reuniendo lo poco de valor que tenía en ese momento, y comenzó a caminar hacia él.

-Oye… *su voz era débil, pero firme* ¿Estás bien?

No hubo respuesta. El niño seguía inmóvil, y la sensación de dolor a su alrededor parecía concentrarse en él.

Cada paso que daba acercándose era un golpe a su alma, veía flashes de mundos ardiendo, de civilizaciones enteras siendo aplastadas por una mano titánica.

Veía ojos llenos de miedo, cuerpos caídos, manos extendidas suplicando una ayuda que nunca llegó.

El dolor lo atravesaba con cada movimiento, pero no se detuvo.

-Está bien… no pasa nada… *murmuró, intentando mantener su voz calmada mientras sentía que cada fibra de su ser quería colapsar.*

Finalmente, cuando estuvo a pocos metros, el niño levantó la cabeza.

Y entonces su rostro comenzó a cambiar. Su expresión de miedo se convirtió en ira, luego en desesperación, luego en tristeza.

Su cara era un torbellino de emociones, y con cada cambio, su voz se multiplicaba: una mujer llorando, un guerrero maldiciendo, un anciano suplicando.

-Nosotros… *dijeron todas las voces a la vez, retumbando en su mente* Nosotros somos su dolor. Su ambición nos mató. Sus manos nos arrancaron la paz. Nuestros planetas… nuestros hijos… nuestros cuerpos… todos fuimos sus trofeos.

El chico retrocedió un paso por instinto, pero respiró hondo, obligándose a mantenerse firme.

-Lo sé… *dijo, tragando saliva, su voz quebrada pero sincera* Lo sé…

El niño gritó, y las voces se volvieron ensordecedoras. Su rostro cambió una vez más, y esta vez habló con un tono acusador, gélido.

-Y tu...vemos a través de ti...quieres poder...para ser igual que el...y la matanza seguirá...mas cuerpos serán apilados glorificando tus matanzas...tal como el

Las palabras lo atravesaron como un cuchillo, pero el joven negó con fuerza, sus ojos llenos de determinación.

-¡No! *gritó, avanzando otro paso mientras el dolor aumentaba, cada paso un torrente de sufrimiento ajeno* No quiero ese poder, solo quiero tratar de ayudar...tratar de inspirar a las personas a ser mejor...quiero traerles paz

Se acercó más, sus piernas temblando. Las voces gritaban más fuerte, las emociones lo golpeaban con violencia, el último aliento de un padre, el llanto de una hija, el odio de quienes murieron sin justicia.

Era insoportable. Pero siguió caminando.

-Yo… estoy aquí para ustedes *dijo, su voz firme a pesar de las lágrimas que comenzaban a formarse en sus ojos* Para aquellos como ustedes. Nadie merece este tormento. No merecen estar atrapados aquí.

El niño lo miraba sin expresión, sus ojos oscuros reflejando un vacío inmenso.

El chico alargó sus brazos, lentamente, y cuando estuvo lo suficientemente cerca, lo rodeó con ellos, abrazándolo con fuerza.

El niño pareció paralizarse. Sus voces se mezclaron en un murmullo confuso, como si no supieran cómo reaccionar a ese gesto. El joven apretó más el abrazo, cerrando los ojos.

En su mente, recordó el pasado, un anciano, que con manos temblorosas lo cubrió, consolando a un niño que lloraba por lo injusto de su dolor

Recordó sus palabras

-Todo va a estar bien *susurró, su voz temblorosa, pero llena de convicción* Por que ya estoy aquí, todo mejorara, pero necesitas tener fe...y si no puedes...yo estaré aquí para ayudarte

Las voces comenzaron a calmarse, aunque el dolor seguía presente. El chico levantó el rostro, mirando más allá del niño, hacia la oscuridad que lo rodeaba.

-Necesito su ayuda *dijo, con fuerza* Ayúdenme a detenerlo. Ayúdenme a que ningún otro mundo viva esto.

El silencio cayó sobre el lugar por un instante. El niño lo miró fijamente, su rostro cambiando entre todas las emociones de las almas atrapadas: ira, tristeza, miedo, esperanza. Sus ojos brillaron débilmente, como una chispa.

Y de pronto, todo volvió a estremecerse.

El chico apretó más el abrazo, sin soltarlo, aunque el dolor lo desgarraba. La oscuridad a su alrededor comenzó a moverse, las voces susurraban, juzgaban, pero también escuchaban.

El vacío que lo rodeaba seguía siendo un mar de sufrimiento… pero ahora había un destello de luz, tenue, titilante, como una promesa.

================================================================

Al borde de la zona de combate, el Capitán América, Ojo de Halcón y Viuda Negra mantenían el perímetro, asegurando que ningún Chitauri o escombro alcanzara a los oficiales evacuados.

Los tres se detuvieron cerca del cuerpo de Chromastone, que permanecía inmóvil, de pie entre los restos de una pared derrumbada.

-¿Estás bien, chico? *preguntó Steve, su escudo aún en guardia.*

El alienígena no respondió. Su único ojo verde estaba apagado, sin brillo, su cuerpo, pétreo y cubierto de púas violetas, se mantenía firme, pero su presencia era inquietante.

Natasha frunció el ceño, acercándose lentamente.

-No parece ni siquiera estar aquí… *murmuró*

Clint ladeó la cabeza, una flecha ya lista.

-¿Crees que lo golpearon muy fuerte? tal vez tiene un tipo de contusión piedril o algo así

El Capitán extendió una mano, intentando llamar su atención.

-Muchacho ¿puedes oírnos?

Pero no hubo respuesta. El alienígena seguía inmóvil, como una estatua viviente, su ojo fijo en el horizonte, aunque no parecía ver nada de lo que tenía delante.

De repente, un pitido agudo sonó en sus comunicadores.

-¡Escúchenme, Vengadores! *la voz de Nick Fury tronó con urgencia* Tenemos un misil nuclear en camino. Impacto estimado en menos de cinco minutos.

El silencio cayó por un segundo.

-¿Qué demonios dijiste? *gruñó Barton.*

-Orden directa de los altos mandos *respondió Fury, su voz cargada de frustración* La misma mierda que siempre dicen "Si no pueden detener a esos bastardos, nosotros lo haremos". Pero si están ahí cuando llegue, no habrá nada que rescatar. Salgan de ahí. Ahora.

El canal se cortó abruptamente. Los tres Vengadores intercambiaron miradas serias, el Capitán apretando los dientes mientras Natasha bajaba la vista, procesando la información. Clint rompió el silencio:

-Genial…¿Cómo vamos a lidiar con un misil nuclear? ¿le lanzo una flecha?

Steve suspiró, intentando trazar un plan en su cabeza. Pero antes de que pudiera hablar, notó algo extraño.

-¿Dónde está? *preguntó de repente, girándose hacia el lugar donde estaba Chromastone*

La sorpresa fue inmediata. Donde antes estaba el alienígena, ahora no había nada. Solo polvo y escombros. Natasha levantó su arma, girando sobre sí misma en alerta.

-No lo vi moverse…

-Yo tampoco *respondió Barton, tensando el arco.*

Steve frunció el ceño, escaneando el perímetro con ojos entrenados.

-¿Adónde diablos fue?

El rugido lejano de Hulk, seguido por el estruendo de otra explosión cósmica, llenó el aire, recordándoles que el combate seguía.

Y en algún lugar, entre la batalla y el inminente misil, Chromastone había desaparecido sin dejar rastro.

================================================================

El estruendo de los golpes sacudía el aire mientras Terrax descargaba todo su poder contra Thor y Hulk, cada impacto resonando en la devastada ciudad.

Thor, con Mjolnir en alto, lanzaba relámpagos que hacían temblar el suelo, mientras Hulk rugía, abalanzándose sobre el coloso cósmico con una furia imparable.

Pero Terrax, aún herido, se mantenía firme, su cuerpo irradiando energía cósmica con cada movimiento.

-¡Son fuertes mortales…! *rugió Terrax, bloqueando el martillo de Thor con un solo brazo mientras apartaba a Hulk de un golpe devastador* Pero no son más que carne y hueso ante el poder de un verdadero dios.

Un rayo repentino de energía repulsora lo interrumpió, golpeándolo directamente en una herida abierta del torso. Terrax gruñó, retrocediendo.

-¡Di queso! *Iron Man apareció volando a toda velocidad, disparando una ráfaga de misiles guiados que explotaron a su alrededor, obligando al Destructor a retroceder.

El titán cósmico levantó su hacha, intentando cortar al Avenger en el aire, pero otro disparo de energía concentrada lo hizo tambalear.

Iron Man giraba alrededor de él, un destello rojo y dorado en el cielo, manteniendo la presión y obligándolo a dividir su atención.

-¡Vamos muchachos, hagan algo, denle con la silla, lo que sea, háganlo mientras está distraído! *gritó Tony, esquivando un proyectil de roca que Terrax había levantado de la calle.*

Thor aprovechó la apertura, lanzando a Mjolnir con un golpe brutal que hizo retroceder a su enemigo.

Hulk se abalanzó de nuevo, aplastando a Terrax contra los escombros con un rugido que retumbó por toda la zona. A pesar de estar herido, Terrax seguía resistiendo, su cuerpo emanando una energía oscura que los empujaba hacia atrás.

El aire se volvió pesado, cargado de una energía opresiva mientras Terrax, frustrado por el combate, levantaba su hacha cósmica. Sus ojos brillaban con un fulgor demoníaco mientras un rugido surgía de su garganta.

.¡BASTA! *bramó, y de su cuerpo estalló una onda expansiva de energía cósmica que iluminó el campo de batalla.

Thor apenas tuvo tiempo de cruzar Mjolnir frente a él antes de que la explosión lo lanzara como un proyectil, incrustándolo en el suelo y creando un cráter a su alrededor.

Hulk intentó resistir, pero el estallido lo golpeó de lleno, hundiéndolo aún más bajo los escombros.

Ambos titanes yacían aturdidos, su respiración pesada y sus cuerpos temblando por el impacto.

La atención de Terrax se centró entonces en Iron Man, flotando a duras penas en el aire.

Con un gesto de su mano libre, el Destructor alteró la gravedad alrededor de Stark, aplastándolo contra el pavimento con un estruendo metálico. La armadura protestó con chispas y crujidos mientras Tony intentaba mover un brazo, sin éxito.

-Patético intento de resistencia *dijo Terrax, su voz grave y gélida mientras alzaba su hacha, que brilló con energía pura

-Que sirva tu muerte de ejemplo para el resto de este insignificante mundo lo que les deparara si se resisten

Inmóvil, Tony solo pudo mirar mientras una esfera de energía cósmica se formaba en la hoja del arma.

El poder era tan inmenso que el aire vibraba, distorsionando el entorno. Tragó saliva dentro del casco, sintiendo el pulso de su propio corazón acelerarse.

-Bueno… así termina todo…Pepper...padre...lo lamento *murmuró para sí, cerrando los ojos con resignación.

Un destello cegador llenó el cielo. El rayo fue disparado con una fuerza devastadora, atravesando el aire cual juicio divino.

Pero el impacto nunca llegó. Tony abrió los ojos lentamente, esperando ver nada más que oscuridad… y en su lugar vio una figura erguida frente a él.

Chromastone.

El alienígena estaba de pie entre Stark y Terrax, su cuerpo pétreo brillando con una luz indescriptible, un resplandor multicolor que se extendía en ondas de energía por cada cristal violeta que sobresalía de su armadura natural.

La energía cósmica que debería haber pulverizado a Tony estaba siendo absorbida, canalizada a través del cuerpo de Chromastone, que resplandecía como si contuviera un sol en su interior.

Terrax frunció el ceño sorprendido .

-¿Otra vez tu?

Chromastone no dijo nada. Su único ojo verde brillaba con intensidad mientras permanecía inmóvil, soportando el torrente devastador. El suelo a su alrededor se resquebrajaba por la presión de la energía, pero él no cedía, su figura irradiando poder.

Tony seguía inmóvil, sus ojos fijos en aquella espalda, incapaz de comprender cómo seguía vivo.

Su respiración se agitó; el pitido del casco era lo único que sonaba dentro de la armadura. Se sentía impotente, pero al mismo tiempo no podía evitar suspirar aliviado de no encontrar su final aun

El rayo terminó, dejando tras de sí un silencio tenso.

Terrax bajó el arma, observando al joven alienígena con una mezcla de incredulidad y creciente fascinación.

El cuerpo de Chromastone aún brillaba, destilando energía cósmica que había logrado contener.

El ojo del alien se giró levemente hacia Stark, el resplandor arcoíris reflejado en la armadura dañada. Por un instante, Tony juró que el alienígena lo miraba con determinación, como si cargara no solo con la energía absorbida, sino también con un peso mucho más grande.

Terrax, ahora visiblemente intrigado, sonrió con malicia

-¿Esto es lo mejor que tienen? *tronó Terrax, alzando su hacha cósmica y apuntando con ella al guerrero petreo* ¿Se supone que TÚ vas a vencerme? ¡Mírate! No eres más que un accidente del universo, un experimento fallido, entregado a mí para mi inevitable ascenso

Chromastone no reaccionó de inmediato. Su ojo verde resplandecía como una estrella, su silencio más amenazador que cualquier respuesta. Finalmente, habló, su voz grave y firme, cargada de una resonancia que parecía venir de mil gargantas al unísono.

-No soy un accidente… y no estoy solo. *Su luz se intensificó, expandiéndose como si el mismo universo respondiera a sus palabras* Cada vida que robaste… cada grito ahogado por tu desmedida ambición… está aquí, contigo ahora. No están aquí para servirte, Terrax. Están aquí para hacer justicia.

Terrax se rio con desprecio, una carcajada oscura que retumbó como un trueno.

-¡Justicia! Qué palabra tan ridícula… ¡Yo soy el poder! ¡Soy la voluntad de Galactus hecha carne! Todo existe para mi uso, para mi deleite. Este universo no tiene héroes… solo recursos. Y tú, criatura, eres solo otro instrumento que utilizaré para mi obra

Chromastone alzó la cabeza, el fulgor de su cuerpo incrementándose hasta que cada grieta en su piel brillaba como lava arcoriris.

-Entonces recuerda bien el nombre de este recurso. Soy Legión. *Sus palabras hicieron que la tierra temblara* Y cargo con la esperanza y sueños de cada vida que destruiste...y hoy daremos fin a tu camino de masacre y muerte

El silencio que siguió fue breve… porque el universo mismo pareció rugir cuando ambos se lanzaron el uno contra el otro.

El combate: un dios contra una legión 

Terrax descargó su hacha con una fuerza capaz de partir lunas, pero Chromastone lo bloqueó con una mano, deteniendo el impacto como si el arma hubiera chocado contra una montaña inamovible.

La energía liberada creó un destello cegador y una onda expansiva que barrió edificios enteros. Terrax retrocedió, sorprendido, y lanzó un corte horizontal que levantó una ola de roca y gravedad alterada. Chromastone absorbió el impacto, dispersando la energía con un gesto de su mano, y respondió disparando un rayo multicolor que atravesó la muralla de piedra como si fuera aire, impactando en el torso de Terrax y haciéndolo retroceder varios metros.

—¡BASURA…! —gruñó el Destructor, incrédulo.

Chromastone no se detuvo; su cuerpo brillaba cada vez con mas intensidad, como si canalizara el poder colectivo de miles de almas.

Se teletransportó a centímetros de Terrax y descargó un puñetazo directo a su pecho, el impacto creando un estruendo sónico. El villano salió disparado a través de varias estructuras, destrozando todo a su paso.

Terrax gruñó de rabia y, desesperado, agitó su hacha, desatando una tormenta de energía cósmica que convirtió el cielo en un mar de rayos púrpura. Legion absorbió el torrente como si su propio cuerpo fuera un reactor, y devolvió el ataque en forma de una explosión de energía tan intensa que obligó a Terrax a arrodillarse para resistirla.

-¡IMPOSIBLE! *rugió Terrax, su voz reverberando en el vacío*¡YO SOY PODER ¡YO SOY TERRA—!

Antes de que pudiera terminar, Chromastone apareció justo frente a él en un destello de luz.

De un solo golpe, lo lanzó hacia el portal. Terrax atravesó el vórtice, arrasando con las tropas Chitauri y los leviatanes que flotaban en las cercanías. Su cuerpo destellaba mientras atravesaba naves como una bala, hasta quedar suspendido en medio del vacío espacial.

-¡NO ERES NADA! *bramó Terrax, su voz resonando por los canales de comunicación de toda la flota, sin rastros de la armadura, su cuerpo cubierto de moretones y heridas abiertas* ¡SOLO EXISTES PARA MÍ! ¡TODO EXISTE PARA MÍ! ¡EL UNIVERSO ME PERTENECE!

Chromastone emergió del portal en un parpadeo, teletransportándose frente a él, su luz eclipsando las estrellas. Su mirada estaba fija, llena de un poder ancestral que no era solo suyo.

-Has cometido el mayor error, Terrax. *Su voz sonaba como un coro de mil almas hablando al unísono* Pensaste que el poder te daba derecho a todo. Pensaste que nadie te detendría. Pero todo camino tiene su final...y hoy el tuyo acaba aquí

Colocó dos dedos sobre la frente del Destructor, que gruñó y trató de resistirse, pero su cuerpo comenzaba a temblar bajo una fuerza que ni siquiera él comprendía.

-Verás el universo con nuevos ojos *susurró Chromastone, mientras comenzaba a brillar con una intensidad tan feroz que las tropas que observaban desde las naves tuvieron que desviar la mirada* Sentirás el peso de cada vida que tomaste. Cada planeta, cada grito, cada lágrima. Y cuando todo termine… ya no tendrás el poder de lastimar a nadie más.

Terrax gritó con furia, desatando un torrente de energía cósmica que habría aniquilado mundos, pero Chromastone la absorbió toda, como si bebiera de su propia fuente de destrucción. La luz en su cuerpo se volvió cegadora; corrientes de energía arcoíris giraban alrededor de ambos, formando un vórtice que distorsionaba el espacio mismo.

-¡NOOOO! *bramó Terrax, mientras sentía su poder desvanecerse.*

Chromastone, con un rugido ensordecedor, extrajo toda la energía restante del Destructor en una oleada final.

Terrax quedó flotando en el vacío, debilitado, su hacha reducida a simple metal sin brillo, su cuerpo despojado de su fuerza cósmica.

Por primera vez en milenios, el Destructor parecía… mortal.

Chromastone, envuelto en un halo divino de energía, lo sostuvo un instante más, mirándolo con frialdad.

-Tu "poder"… tu "derecho"… tu "obra"… todo termina aquí.

Con un destello final, la energía se disipó. Terrax floto inconsciente, su presencia reducida a la de un simple guerrero derrotado.

El silencio del espacio se hizo absoluto mientras Chromastone permanecía flotando, irradiando un resplandor majestuoso que iluminaba toda la flota enemiga, obligándola a retroceder.

En ese instante, las voces dentro de él dejaron de gritar. Ya no eran lamentos, sino un suave susurro de paz.

El silencio que siguió a la derrota de Terrax duró apenas segundos.

A través del vacío, un punto brillante se acercaba rápidamente: era Iron Man, con su armadura dañada, arrastrando el peso de un misil nuclear que apenas podía sostener con los repulsores.

Su voz sonaba ronca y entrecortada en el canal de comunicaciones:

-Este… es el plan.

Tony Stark ascendía lentamente, su figura metálica iluminada por el resplandor púrpura del portal. El misil estaba armado y listo para detonar. Él apenas mantenía el vuelo, cada movimiento costándole más esfuerzo. No había vuelta atrás.

Desde el cielo sobre Nueva York, todos lo observaban. El portal continuaba escupiendo hordas Chitauri, pero la batalla parecía haberse detenido en seco ante la escena.

En un instante, el proyectil fue liberado. El misil se deslizó hacia la nave nodriza enemiga con una trayectoria perfecta, mientras Stark, con el cuerpo exhausto, seguía elevándose hacia el portal.

Chromastone, aún resplandeciendo con la energía que había absorbido, apareció en el aire, cargando a Terrax en uno de sus brazos. Con un destello de luz multicolor, se teletransportó directamente al trayecto del misil, esquivándolo por una fracción de segundo antes de que pasara rugiendo a su lado.

En el siguiente instante, estaba junto a Iron Man.

-No seas exagerado, no morirás aquí *dijo con voz grave, mientras extendía sus brazos*

Sin resistencia, Stark fue tomado en brazos, su armadura sin fuerzas para seguir impulsándose. Con una ráfaga de energía, ambos atravesaron el portal justo cuando el misil impactaba la nave nodriza.

Del lado de la Tierra, un destello cegador iluminó todo el cielo: la explosión nuclear arrasaba el corazón de la flota enemiga, su onda expansiva extendiéndose como una tormenta solar. El portal se estremeció, vibrando como un espejo a punto de romperse.

Pero dentro, en el ojo del huracán cósmico, Chromastone no se detuvo. Se movía con precisión entre los escombros flotantes y las descargas de energía, llevando a Stark y Terrax en brazos mientras el portal temblaba detrás de ellos.

El rugido de la explosión se sentía como una presión constante, la radiación y el fuego avanzaban sin piedad.

En el centro de la torre Stark, suspendido en una columna de energía azulada, estaba el Teseracto. Sus pulsaciones mantenían abierto el portal, alimentando la grieta.

Chromastone flotó frente a él, observando el cubo por una fracción de segundo, solto a quien tenia en brazos, dejándolos flotar detrás de el. Luego, extendió su mano.

Su cuerpo brilló intensamente, más que nunca. La luz multicolor que lo envolvía se fusionó con el resplandor azul del Teseracto.

Con un solo movimiento, tomó el cubo, canalizando su energía. Sus cristales se iluminaron como soles diminutos mientras una onda de poder recorrió el espacio circundante.

El portal comenzó a colapsar.

Desde la Tierra, los héroes y soldados que observaban vieron cómo el resplandor azul se apagaba, cómo el círculo de energía se hacía cada vez más pequeño mientras la explosión nuclear avanzaba… y, justo antes de que el fuego consumiera todo, el portal se cerró de golpe.

Luego...le siguio el silencio

El cielo de Nueva York estaba despejado, salvo por los restos de la batalla. Las naves Chitauri, privadas de su vínculo, caían sin control.

En lo alto, flotando entre los restos del combate, Chromastone descendía lentamente, con Iron Man y Terrax levitando detras de el y el Teseracto asegurado en su mano.

Su ojo verde brillaba con intensidad, un faro de victoria en el silencio de la ciudad

================================================================

SINCERAMENTE, ME QUEDO BIEN LARGO, IBA A PUBLICARLO AYER, PERO NO TERMINABA MAS JAJAJA.

ASI QUE HOY LO TERMINE CON MAS TRANQUILIDAD, ME DABA PARA DOS EPISODIOS PERO COMO LES DIJE QUE EL DE AHORA ERA EL FIN DE ESTE "ARCO", QUERIA QUE QUEDE EN UN CAPITULO

¿ QUE ALIENS LES GUSTARIA VER A MEDIDA QUE AVANCE LA HISTORIA?¿CUAL LES GUSTARIA O ESPERAN CON MAS ANSIAS?

HULK Y THOR SON PERSONAJES SUMAMENTE PODEROSOS, PERO EN ESTE PUNTO DE LA HISTORIA NO CREO QUE SEAN RIVALES PARA ALGUIEN CON ENERGIA COSMICA...AUN, COMO POR EJ, SILVER SURFER, ASI QUE CREO APROPIADO QUE HAYAN PUESTO CONTRA LAS CUERDAS A TERRAX, AL PUNTO EN QUE NECESITE USAR LA TOTALIDAD DE SU PODER PARA NO SER HUMILLADO

ESPERO QUE LES HAYA GUSTADO Y QUE ESTEN SATISFECHOS, AGRADECERIA SUS COMENTARIOS AL RESPECTO, MENCIONANDO AQUELLO QUE LES GUSTA Y LO QUE NO LES CONVENCE O QUE DEBERIA CORREGIR, ASI TENGO SUS COMENTARIOS EN CUENTA Y PODER MEJORAR ESTA HISTORIA CON SUS APORTES

POR ULTIMO, SOY CONCIENTE DE SUS PREGUNTAS, PERO HAY ALGUNAS COSAS QUE NO PUEDO CONTESTAR DEL TODO POR QUE SERIA SPOILER, RECUERDEN QUE EXISTEN DOS VERSIONES DE ESTA HISTORIA, UNA EN ESPAÑOL Y OTRA EN INGLES

MIL GRACIAS POR SU APOYO Y COMENTARIOS

ESO SERIA TODO POR AHORA MUCHACHOS, SE ME CUIDAN :)

More Chapters