"Madre..."
Mientras Ritsuka y el grupo se ponían a la defensiva, Jeanne se quedó atónita mirando a Kurumi.
*Pum, pum, pum
Los latidos de su corazón se aceleraron y su mente viajó a través del cielo o para ser más preciso, despertó algo que dormía dentro de ella..
"¿Huh?"
Jeanne lo vio, un ser muy poderoso sentado en un trono del cielo, su aura santa como las alas en su espalda era un reflejo de la identidad...
"¿¡Ángel?!"
Jeanne casi tuvo una sombra psicológica por la actuación de Origami y Mayuri, ahora los Ángeles a sus ojos no necesariamente son algo bueno para la humanidad.
Pero pensándolo mejor esto era verdad, a través de la biblia los ángeles son más una prueba y castigo para la humanidad que la misma salvación.
La mujer en el trono no se preocupó por la reacción de Jeanne, frunció el ceño con fuerza y mordió sus labios.
Su mirada penetró a través de las 'capas' externas de la carne cayendo sobre Kurumi.
Sus puños se apretaban y aflojaban a cada momento, sus sentimientos inestables, de ira, miedo, vergüenza y por último calma.
Tales emociones no eran suficientes para que está mujer expresara sus sentimientos hacia su 'madre'...
"Niña, perdoname... Tomaré prestado tu cuerpo..."
Por supuesto las palabras de esta mujer en trono no eran para Jeanne, al contrario era para la chica humana que aceptó ser el recipiente de Ruler, a pesar que esto podría costarle la vida.
Leaticia una estudiante francés, decente y honesta, posee una piedad religiosa que supera a muchas otras.
Leaticia es sin duda la humana más cercana a Jeanne, rasgos faciales y estilo son en parte similares y Jeanne es sin duda la más cercana a esta mujer en el trono.
Lo que equivale a ser también compatible con Leaticia y por supuesto ella también estaba presente junto a Jeanne
"¿Quién es usted?... Su santidad..."
Temblando ya sea de emoción o de presión, Leaticia hizo la pregunta que más quería saber Jeanne.
La mujer en el trono se levantó y avanzó con gracia hacia Leaticia, sus alas rodeadas de luz se balancearon creando una vista purificadora.
"Tengo muchos nombres, pero puedes llamarme ... Metatron"
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Para el grupo Kurumi era una especie de madre malvada dominante, que si no es por su sangre divina o protecciones, estos Servant no se atreverían a mirarla, por el miedo del linaje.
Por suerte Gilgamesh y Enkidu no se preocuparon por eso, uno era un semidiós y el otro estaba hecho de arcilla, activaron la puerta de Babilonia lanzando noble Phantasm indiscriminadamente.
*BAM, BAM, BAM
La oscuridad protegió a Kurumi a toda velocidad, creando olas oscuras que interceptaron los tesoros.
"¿Protección contra hechizos Ying, Yang?"
"Esto parece complicado, Gil..."
Gilgamesh frunció el ceño, las barreras creadas a partir de las reglas no eran fáciles de penetrar, aunque tenías muchos tesoros capaces de hacerlo, esto también trae consecuencias, por ejemplo, podía sentir que Kurumi no es fácil de vencer, su nivel de peligro está a la altura de la mujer que habría portales, aunque no tenga la capacidad de reprimir a la puerta de Babilonia como Mukuro, es un hecho que Kurumi no se había movido desde que apareció, los tesoros ordinarios no le hacían ni cosquillas y permaneció sonriendo con las manos detrás de su espalda.
La confianza que irradia lo hizo dudar, con el mundo cambiado su Omnipotente y omnisciente estrella quedó sellada, no pudo ni sentir su presencia, además que este 'mundo' lo hacía sentir presionado, tal como un hámster en una jaula a la vista de su dueño.
"Ara~ ¿Eso es todo? Si los niños no tienen más trucos, es mejor dejarle el movimiento a mamá"
*Tick, tack
Lamiéndose los labios, detrás de Kurumi apareció Zafkiel, su apariencia de reloj dorado antiguo le dio muy mala espina a este par de amigos.
"Zafkiel: zayin..."
*Bang, Bang , Bang
La séptima bala fue disparada en sucesión, con el poder del Trono ahora Kurumi no se preocupa por el tiempo y el consumo, tiene tanta energía como para congelar el tiempo del mundo que unos cuantos Servant no son nada...
Gilgamesh y Enkidu no se atrevieron a bloquear estás balas, con el gran reloj dorado, no necesitaban ser un genio para saber qué el tiempo no se mete cualquiera.
La magia del tiempo siempre ha sido misteriosa y una de las más poderosas.
Renunciaron a su orgullo, evitando a esta mujer.
*BAM, BAM....
Las sombras de Kurumi tomaron forma de púas imitando el noble Phantasm de Vlad III.
"¡Declaración del Gran Dios!"
Gilgamesh no se quedó de brazos cruzados, el tesoro de Babilonia se abrió y una lanza de mitología apareció en su mano...
"¡Gungnir!"
La lanza que jamás falla, liberando su verdadero nombre, está salió disparada como un proyectil guiado, se dice que está lanza seguramente golpeara, no importa cómo y dónde, el enemigo será atravesado por está lanza.
Antes Gilgamesh quería usar está lanza contra Mukuro, debido a que no podría bloquearla con sus portales, pero no lo hizo ya que la verdadera forma de la lanza de Mukuro era mucho más aterradora que Gungnir, aunque es inevitable, Mukuro podía destruirla.
"¡Zayin!"
*Bang...
La bala y la lanza chocaron, pero no ocurrió una explosión, la bala parecía una especie de barro que al chocar con esta lanza, el tiempo a su alrededor se detuvo...
La lanza inevitablemente golpeara a Kurumi, sin embargo hay una gran laguna en este concepto de jamás fallar.
Podría retrasar el efecto tanto como quiera, incluso puede extender el tiempo hasta el infinito un espacio donde la lanza siempre la perseguirá pero nunca la alcanzará.
La lanza puede ignorar el espacio, pero no el tiempo, caerá en un futuro distante muy lejos.
Y este efecto de congelar el tiempo era la prueba.
"¡Rompe como el espiral, Gran espada arcoiris!"
Fue en ese momento que Enkidu, apareció frente a Kurumi, un 'ser' hecho de arcilla, la tierra es su elemento, aunque no podría considerarse realmente su elemento en este mundo de colores, aún así el mundo de los sueños toma la realidad como prototipo y lo cambia, también existes la 'tierra' en cierta parte, pero esto puede ser anulado, sin embargo no era Natsumi quien pelea...
Cómo no había otra opción que ir a lo grande, la espada espiral Caladbolg es uno de los más poderosos nobles Phantasm de gran alcance y potencia, su ataque destrozó el suelo, un ataque casi a quemarropa, obligó a Kurumi a cubrirse con su sombra.
Caladbolg no fue capaz de romper la defensa de sombra, pero esto no era lo que Enkidu quería.
*Creakkkk
"¿¡Huh?!"
La sombra se quebró y la punta de una lanza se reveló, Kurumi abrió los ojos grandes por lo que estaba pasando.
Desde el principio el objetivo de Enkidu nunca fue perforar su defensa, era derribar lo que ataba a Gungnir...
"¿¡Guhh?!"
La lanza fue muy rápida atravesando su cuerpo y traje astral, sangre brotó de los labios de Kurumi.
"Ustedes... Niños..."
Incapaz de terminar la oración, Kurumi se derrumbó en un charco de sangre...
"Está muerta.."
Es una apuesta, sin saber las habilidades de esta Eva, ni Gilgamesh y Enkidu se atrevieron a descuidarse, el Tiempo es formidable, su cooperación entre ellos casi llega al punto de saber lo que la otra parte piensa.
Por lo que fue fácil cooperar y engañar a esta Eva, aún así ninguno de los dos se acercó al cadáver.
Aunque estaba 'muerta' Kurumi aún no desaparecía como un espíritu heroico.
"¡Fallo!"
"Así parece, Gil..."
Abriendo la puerta de Babilonia, ambos bombardearon la zona a su alrededor, obligando a las sombras a tomar forma...
"Ara, ara~, que niños tan maleducados, no tienen piedad ni por los muertos..."
Apareciendo completamente ilesa, Kurumi camino lentamente, donde su clon yacía en sangre...
"Que lastima, esperaba que al menos bajarán la guardia"
Encogiéndose de hombros, Kurumi pateó el suelo y la sombra trago a su clon.
"Los subestime un poco, al menos son mejores que esas mujeres..."
A quién se refería Kurumi era obvio a Scathach y Tiamat, quienes cayeron con el truco de la 'muerte' descuidando a sus maestros y logró secuestrarlas.
Kurumi quería hacer lo mismo, pero ya sea Gilgamesh o Enkidu, mantuvieron abiertas las puertas de Babilonia sobre las cabezas de los maestros, esperando el momento de lanzar un ataque a quemarropa...
"Hmph, si crees que caemos en un truco tan trivial, desprecias a este Rey..."
"Soy hijo de la tierra 'Cuñada', no puedes escapar de mi 'vista'..."
Con los pies en la tierra, Enkidu podía ver a través todo a su alrededor, esto también atrapa a las sombras...
"Hihihi~ que divertido, tienes razón fue muy superficial de mi parte subestimarnos...pero~"
Lamiéndose los labios, Kurumi entrecerró los ojos juguetones...
"También me estás subestimado ~"
Al caer las palabras de Kurumi, las sombras se retorcieron como un gusano y figuras carmesí salieron de ella, tomando la apariencia de la malvada Eva....
"¡¡..!!"