Siento como el sol de amanecer penetra mis pestañas, siento como mi cuerpo se contrae cuando intento moverme.
Cuando abro mis ojos lo primero que puedo ver es un techo blanco, intento levantar mi cabeza y cuerpo de la cama pero siento un dolor en el abdomen, además no tengo las fuerzas para hacerlo, solo puedo suspirar mientras una pequeña sonrisa de impotencia se forma en mi rostro.
Mientras me resigno y apoyo mi cabeza en la cama, no puedo evitar mirar a mí alrededor, estaba en la misma habitación de siempre con paredes blancas con una máquina y una mesa a mi derecha, así como una cortina azul que evita que el sol penetre en la habitación.
Si estaba en un hospital, el mismo desde hace algunos años, otro suspiro escapo de mi boca, mientras mi mano derecha a duras penas se mueve, la levanto y la llevo a tomar un pequeño espejo de la mesa a mi derecha y veo mi reflejo.
Mi piel blanca enfermiza, mis mejillas hundidas, mi poco cabello, así como muchas arrugas que adornan mi rostro, aquí a mis 27 años reflejaba una edad mucho mayor.
Aun creo increíble como llegue a este estado deplorable, me pareció que fue hace unos meses que todo estaba relativamente bien.
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Deja que te cuente un poco sobre mí, tengo 27 años, no tengo padres o algún familiar, fui llevado a un orfanato, cuando mi madre murió, tenía que 10 años?, No estoy muy seguro mi madre fue la única que recuerdo nunca nadie más estuvo allí con nosotros, mi padre nos abandonó cuando cumplí 5 años, recuerdo a mi madre llorar las primeras semanas, luego lo supero, mi madre siempre me enseño a salir adelante y buscar oportunidades ya que ellas nunca vienen a ti.
Así que desde pequeño busque la manera de ayudarla con el dinero, recogiendo latas de aluminio en la calle, o ayudando a alguien por dinero, éramos clase media-baja así que algunas cosas se tenían que hacer quisiera o no, aunque no tuviéramos una gran casa, o una piscina o un auto o cualquier otro bien material, éramos felices, nunca falto el alimento en la mesa, ambos nos teníamos el uno al otro eso era suficiente.
Pero lo bueno nunca dura, mi madre fue diagnosticada con cáncer cuando tenía 6 años, estaba en las últimas etapas, le habían dicho que le quedaban entre 4 y 5 años si no se trataba, la escuche llorar muchas noches, yo como un niño ingenuo no sabía que significaba esto, solo podía abrazarla mientras ella solo lloraba más fuerte y me decía lo mucho que me quería.
Cuando cumplí 10 mi madre estaba postrada en una cama, ya no podía moverse, solo podía ir a verla al hospital cada cierto tiempo, en ese momento estaba viviendo en un orfanato, yo no podía seguir pagando la renta de la casa, mi madre ya había llamado para que se hicieran cargo de mí.
Sucedió una tarde mientras estaba de visita, lo recuerdo como si fuera ayer, el cielo estaba oscuro parecía que fuera a llover en cualquier momento, cuando entre a la habitación de mi madre la encontré en un estado consciente, tome su mano mientras la miraba, podía sentir los huesos de su mano rozar mi piel, podía sentir mi corazón latir cada vez más rápido, mientras la miraba, su mirada perdida, apretó mi mano mientras me decía, que me amaba, que tenía que ser fuerte, que tenía que trabajar duro y siempre seguir adelante y no detenerme. Sentí como las lágrimas caían por mis mejillas, mientras solo podía asentir lentamente mientras mis labios temblaban, sentí su mano apretar la mía y luego me sonríe, asentí más fuerte mientras de mi boca salía un fuerte si, ella solo sonríe más fuerte, y cierra sus ojos, siento su mano aflojar y luego, nada.
A partir de ese momento comencé a vivir de manera diferente, me di cuenta de lo corta que puede ser la vida, me esforcé al máximo en todo lo que hacía aunque no fuera bueno en algo, mi vida en el orfanato fue normal diría yo, no tenía amigos, y los amigos que había tenido fueron adoptados, nunca nadie intento adoptarme, pero eso no fue un problema para mí, está bien con eso.
A los 16 años, deje el orfanato, no tenía padres, amigos o familiares, tuve que comenzar a vivir en las calles con el poco dinero que tenia de haber vendido algunas cosas de mi madre, no quería hacerlo pero tenía la necesidad, algunas veces iba a un refugio, aprendí a sobrevivir en las calles, esperar fuera de un restaurante a que tiren los desechos cuando no tenía dinero, a dormir en un callejón con un cartón como sabana, a pelear por comida con otras personas sin hogar, pero luego de vivir de esa manera por un tiempo las cosas mejoraron temporalmente.
Encontré trabajo en una construcción, y pude comenzar a pagar por mi propio lugar, ya no tenía que vivir como lo había hecho, ya con una situación más estable, pude terminar mis estudios, a mis 20 años podía comenzar a ir a la universidad, además había obtenido una beca en la carrera ingeniería civil, que me facilitaría muchas cosas, pero no todo fue bien, a los 24 años comencé a tener dolores en el abdomen, nauseas, vomito entre otros, honestamente ignore todo esto ya que no tenía dinero para pagar por los exámenes que esto requería, así que solo fue 7 meses después que pude ir a un médico y bueno me diagnostico cáncer de estómago, no sabía cómo sentirme mi madre murió de eso y ahora era mi turno, el médico me dijo que estaba en las primeras etapas y aún existen maneras de tratarlo, pero que los tratamientos eran costosos.
Solo suspire, no tenía familia, ni amigos, pero aun así quería vivir más, nadie quiere morir y yo no soy la excepción, asentí al doctor y le dije que no tenía dinero para pagar los tratamientos, me miro con una mirada de compasión, que me molesto, dijo que había un programa donde podía inscribirme y tal vez el estado financiaría los tratamientos, pero que no tuviera esperanza en eso, asentí en comprensión, me registre y me fui.
Pasaron 3 años, en este tiempo sucedieron muchas cosas, perdí mi beca hace unos años mi desempeño se vio obstaculizado con el aumento de dolores, también perdí mi trabajo no tenía la fuerza suficiente para ese tipo de trabajo, además estoy hospitalizado ahora, gracias a una organización contra el cáncer aunque solo se encargaría de eso mas no de tratamientos, mi cáncer seguía avanzando estaba en la 4, cada día, tenía menos hambre, el dolor aumentaba y dormía, había comenzado a tener sueños raros, me despertaba y me encontraba rodeado de montañas negras, el cielo era rojo, podía ver humo saliendo de diferentes lugares, luego veo un hombre vestido de negro en un barco, me toma del brazo y me hizo subirme con él, luego todo era borroso, siempre me despertaba en ese momento, este sueño se repetía una y otra vez, sabía que significaba pero no quería admitirlo.
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Sonreí mientras veía mi reflejo en el espejo, mi momento estaba llegando, en todo este tiempo pude reflexionar sobre mi vida aunque hubo algunas decisiones que pudieron ser tomadas de otra manera no me arrepiento de ellas, ya no tenía miedo de lo que estaba por venir, es más lo aceptaba con una sonrisa.
Devolví el espejo a la mesa y tome una revista, y la hojeaba era el único entretenimiento que tenía, quería leer algunas novelas o manga estaba acostumbrado a ellos, ya que era mi pasatiempo favorito anteriormente, hacía mucho tiempo que no leía alguno, pero no tenía visitas mucho menos amigos que pudieran traerme alguno, suspire aquellos que considere amigos nunca lo fueron, y aquí estoy dándome cuenta al final de mi vida de que, si buscas una mano amiga empieza por tu brazo.
Mientras hojeaba la revista, la cual ya estaba familiarizada, alguien entro por la puerta, escuche sus pasos acercarse a mi cama, deje mi revista en mi pecho mientras esperar que se acercara, llego un doctor con lentes de unos 40 años.
''Buenas tardes Señor… Queen'' dijo el doctor mientras veía su cuaderno, y luego me miraba.
''Buenas tardes'' le respondí mientras tosía un poco, me era difícil hablar es mi estado actual.
''Es bueno encontrarlo consciente Señor, me gustaría hablarle sobre alguna cosas'' Me dijo mientras se acerca un poco más a la cama.
''Claro, dígame lo estoy escuchando'' Le respondí débilmente casi parecía un susurro.
''Bueno lamento infórmale que su cáncer ha avanzado a un estado terminal y no hay nada más que podamos hacer por usted, aun con tratamientos solo podríamos alagar su vida por un poco de tiempo. '' Dijo mientras miraba directamente a mis ojos.
''Ya veo, entonces que quiere proponerme, no creo que venga solo a decirme solo eso. '' Le dije mientras tosía la mayor parte de la oración, esa es la oración más larga que he tenido en mucho tiempo.
''Bueno vera en la última etapa el dolor vera un aumento mayor en comparación con la actualidad, y pasara inconsciente de su entorno la mayor parte del tiempo entre otras cosas, así pues queríamos proponerle la práctica de la eutanasia, eso es por supuesto si está de acuerdo con ello. '' Dijo mientras tomaba una actitud más seria.
''Eutanasia, ya escuche sobre ella, pero no estoy dispuesto'' Le dije mientras miraba a sus ojos directamente.
''Pero es simplemente pasar por un dolor innecesario, el director del hospital ya aprobó esta idea, así que si usted dice que s..''
''Escuche doctor, ya se lo dije no estoy dispuesto, no hay nada que puedan hacer para cambiar mi pensamientos. '' Le respondí mientras levantaba mi voz lo más que podía, mientras no dejaba que terminara lo que estaba tratando de decir.
El doctor se quedó callado, no estaba molesto o no lo dejaba ver, mientras suspiraba y asentía con la cabeza.
''Entiendo'' Dijo luego se dio la vuelta y lo escuche salir mientras caminaba por la habitación, abría la puerta y luego la cerraba.
Suspire cuando se fue, ya no había nada que hacer, solo podía esperar a que mi tiempo llegara a su fin, pero aun así no quería optar por la eutanasia, mi madre paso por todo eso, y lo tomo de frente, que es un poco de dolor más después de todo, pensé mientras cerraba mis ojos y dormía.